Martes 24 de Septiembre de 2013
Así lo aseguró el Ministerio del Interior keniano en su cuenta de Twitter luego de unas 60 horas de haber permanecido tomado el shopping Westgate.
Casi 60 horas después de que un comando islámico inició un ataque a un centro comercial de la capital de Kenia, las fuerzas de seguridad del país africano aseguraron ayer que recuperaron el control del lugar, donde murieron al menos 62 personas y más de 180 resultaron heridas.
"Tenemos el control" del centro comercial Westgate de Nairobi y "creemos que todos los rehenes fueron liberados", afirmó el Ministerio del Interior keniano en su cuenta de Twitter.
"Nuestras fuerzas están registrando el centro comercial piso a piso", agregó el Interior, aunque sin aclarar la suerte corrida por los milicianos del grupo somalí Al Shabaab atrincherados en el edificio, que quedó rodeado por el Ejército.
Poco antes, el Gobierno keniano había declarado que las operaciones en el centro comercial para poner la situación bajo control "se estaban acercando a las etapas finales".
"Todos los rehenes fueron liberados, pero no quiero correr ningún riesgo", explicó el portavoz del gobierno keniata, Manoah Esipisu, informó la agencia de noticias ANSA.
Luego, en una declaración televisada, el vicepresidente de Kenia, William Ruto, aseguró que "las Fuerzas de Seguridad están en la última fase para desalojar a los terroristas".
Las autoridades del país africano informaron además que entre diez y quince extremistas permanecían en el interior del establecimiento, que tres asaltantes habían muerto en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y que once soldados resultaron heridos.
Durante la jornada de ayer al menos tres fuertes explosiones y diversas ráfagas de disparos se escucharon ayer en el centro comercial, de donde salió una gran columna de humo negro. En tanto, desde el sábado, un total de 62 civiles perdieron la vida en el atentado, que causó también unos 180 heridos, confirmó el ministro keniano del Interior, Ole Lenku.
Asimismo, unas mil personas fueron evacuadas de la superficie comercial desde el sábado, cuando tuvo lugar el asalto al Westgate, uno de los centros comerciales más lujosos de Nairobi y frecuentado por expatriados y kenianos de clase alta.
"Terrorismo mundial"
El jefe del Ejército, Julius Karangi, por su parte, declaró a la prensa local que el grupo armado está integrado por milicianos de diversas nacionalidades, y que esta composición "claramente multinacional", indica que se debe abordar el problema como "terrorismo mundial". En el ataque murieron, entre otros, un médico peruano, dos francesas, tres británicos, una holandesa, un sudafricano, una surcoreana y dos indios, además del poeta ghanés Kofi Awoonor.
Las reacciones al sangriento asalto se hicieron escuchar entre toda la comunidad internacional. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó ayer el "terrible" asalto.
Antes de reunirse con el presidente nigeriano, Goodluck Jonathan, en Nueva York, adonde llegó ayer para asistir a la Asamblea General de la ONU, Obama indicó que
Estados Unidos ya está cooperando ya con las autoridades de Kenia para poner fin a ese asalto. "Quiero expresar personalmente mis condolencias no solamente al presidente Kenyatta, quien perdió a algunos miembros de su familia en ese ataque, sino también al pueblo keniano", dijo el mandatario de EE.UU.
