Viernes 19 de Abril de 2013
El "Matador" goleó a Libertad 5-3 en Paraguay y se clasificó a los octavos de final del torneo por primera vez. Dos goles de Botta, dos de Pérez García y uno de Gastón Díaz decoraron el gran triunfo.
Tigre logró lo que parecía imposible un par de semanas atrás: con una actuación impecable derrotó 5-3 a Libertad en Asunción, avanzó al segundo lugar en su zona y clasificó a los octavos de final de la Copa Libertadores.
El conjunto que orienta Néstor Gorosito fue a buscar el partido a Paraguay y se llevó un merecido éxito, gestado a partir de notables trabajos de Rubén Botta y Matías Pérez García, autores de dos tantos cada uno. El otro grito del conjunto de Victoria fue obra de Gastón Díaz, de penal.
Después de un inicio complicado, en el que Pablo Velázquez estrelló la pelota en el travesaño del arco de Javier García, el visitante pudo manejar la pelota y le jugó de igual a igual a Libertad. Cada vez que Botta tomó la pelota, ya sea por izquierda o derecha, generó zozobra en la defensa local. Y el talentoso volante tuvo un buen socio en Gabriel Peñalba, que se hizo patrón del centro de la cancha.
La apertura llegó sobre los 10 minutos cuando Botta recibió cerca de la medialuna, giró, desairó a Ismael Benegas y sacó un zurdazo alto que se le metió arriba a Rodrigo Muñoz.
El golazo no desanimó a Libertad, que se lanzó desesperado en busca del empate y lo consiguió rápidamente, sobre los 14’, cuando Miguel Samudio recibió un pase en profundidad y definió de zurda, con clase, ante la salida de García.
Parecía que el elenco guaraní se adueñaba del partido, pero Tigre, al que sólo le servía una victoria, volvió a ir hacia adelante, sin prisa pero sin pausa. Manejó la pelota con criterio y volvió a ponerse en ventaja con otro golazo. Botta arrancó la jugada, esta vez por derecha, y sacó un centro que le quedó atrás a Ezequiel Maggiolo. Pero el delantero, inteligente, asistió atrás a Pérez García que definió con un bombazo que se metió en el ángulo.
Una inexplicable agresión sin pelota de Ismael Benegas a Maggiolo dentro del área -le aplicó dos codazos delante del árbitro- dejó al local con un jugador menos y le permitió a Tigre ampliar distancias con un penal concretado por Gastón Díaz sobre los 32’.
Cinco minutos más tarde, José Núñez puso el 3-2 con el que se cerraron los 45 minutos iniciales. Quedaba un tiempo y todo podía suceder.
El complemento volvió a ser de ida y vuelta, esta vez con Tigre parado de contragolpe. Y a los 9’ lo liquidó Pérez García en una réplica letal. Como frutilla del postre quedó el último gol de Botta, que nació en una muy buena acción de Pérez García, un premio para las dos grandes estrellas de la noche. Lamentablemente, en la última acción del partido, Velázquez descontó y bajó del primer puesto al conjunto azulgrana. Fue un triunfo con sabor a hazaña para Tigre, que hace tres semanas estaba con un pie afuera de la Copa, pero no traicionó su estilo, salió a buscar el triunfo en todos lados y al final obtuvo un merecido premio.