Jueves 4 de Abril de 2013
Boca jugó mal pero le alcanzó para derrotar 1-0 a Barcelona de Guayaquil, en La Bombonera, y esta noche podría avanzar a la próxima ronda. El gol lo marcó Nicolás Blandi, a los 8’ del primer tiempo.
Blandi y compañía celebran el gol "xeneize" en el arranque del partido.
Boca volvió a jugar mal y se complicó frente a un adversario muy débil, pero en definitiva venció 1-0 a Barcelona de Guayaquil y está a un paso de los octavos de final de la Copa Libertadores. Nicolás Blandi, esta vez centrodelantero titular, marcó el único gol del equipo de Carlos Bianchi, que fue de mayor a menor a lo largo del juego, reiteró problemas de contención en la mitad de la cancha y no tuvo solidez en su última línea, pero logró sostener hasta el epílogo la mínima diferencia.
El local comenzó ejerciendo presión muy arriba y acorraló a Barcelona. A los 2’ tuvo su primera llegada, con un desborde y centro bajo por derecha de Pablo Ledesma que Blandi conectó débil y contuvo Máximo Banguera. Y a los 8’ se puso en ventaja en una jugada en la que Franco Sosa ejecutó un centro pasado, que bajó Guillermo Burdisso y Blandi llegó para empujar la pelota hacia la red.
Con el correr de los minutos Boca se fue desdibujando, empezó a dividir el balón, dejó ver algunas fallas en defensa y sólo mejoró ocasionalmente con los encuentros de Juan Román Riquelme, Walter Erviti, Juan Manuel Martínez y Clemente Rodríguez por izquierda, más la presencia siempre inquietante de Blandi en el área, por otra parte muy mal marcado.
El segundo tanto pudo haber llegado a los 18’, con un cabezazo de Burdisso desviado después de un centro de Riquelme; a los 23’, con remate de Guillermo Fernández que rechazó Banguera, tras asistencia de Riquelme; a los 30’ y a los 37’, con dos disparos de Blandi, el primero que tocó el travesaño y el otro por encima, uno por centro de Sosa y otro, por tiro libre de Riquelme.
Barcelona por momentos consiguió emparejar el juego en cuanto a la posesión, pero nunca encontró profundidad y solo puede mencionarse una aparición sin marca de Matías Oyola por izquierda, quien se enredó bien hostigado por Agustín Orion, a los 23’, y un giro de Ariel Nahuelpan con remate débil a las manos del arquero, a los 38’.
El segundo período de Boca fue muy deficitario, en ningún momento tuvo control del juego y permitió que la visita creciera con las apariciones de Michael Arroyo por izquierda y la mayor participación de Damián Díaz. El conjunto ecuatoriano jugó gran parte del capítulo metido en campo rival y aunque las llegadas no fueron muchas, lo cierto es que Boca estuvo complicado en todo momento.
Boca podría quedar clasificado hoy si Nacional vence a Toluca en Montevideo, pero para sostener sus ambiciones necesitará del fútbol que por ahora no tiene.