Martes 25 de Junio de 2013
El líder de La Primavera, Félix Díaz, y el Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, fueron recibidos por Bergoglio, quien mostró su preocupación por la comunidad formoseña y la falta de diálogo.
El Papa recibió ayer en el Vaticano al jefe de la comunidad qom La Primavera, Félix Díaz, quien le pidió que interceda para que la presidenta Cristina Fernández acepte reunirse con representantes de ese grupo formoseño y denunció las violaciones a los Derechos Humanos que afrontan los pueblos originarios.
Acompañado por el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien gestionó el encuentro en la Santa Sede, el líder qom calificó de "muy importante" la reunión con Jorge Bergolio. "Nos escuchó, conoce la problemática de los pueblos originarios de Argentina y se manifestó preocupado por lo que pasa con nuestra comunidad que reclama justicia y diálogo", dijo Díaz.
En declaraciones radiales, el líder de La Primavera contó que pidió al Papa que "interceda" ante la Presidenta, quien evitó recibirlos pese a que realizaron una vigilia en Plaza de Mayo y entregaron un petitorio con los reclamos por el derecho a la tierra y el cese de la represión en la provincia gobernada desde 1995 por el kirchnerista Gildo Insfrán.
Tras la audiencia privada, de 45 minutos, el cacique manifestó que "el Papa está preocupado por la falta de respuestas del Gobierno nacional y en especial por el de Formosa, que no tiene la voluntad de resolver este conflicto". Además, destacó que Francisco les recordó que la "mejor forma de conseguir resultados en momento es a través del diálogo".
En tanto, el vocero vaticano, el sacerdote Federico Lombardi, dijo en un comunicado que Díaz "manifestó al Santo Padre su agradecimiento por esta audiencia y por lo que significa como manifestación de interés y de apoyo, y le expresó las dificultades que sufren los pueblos indígenas de Argentina y de América Latina". El representante qom asistió al Vaticano junto al Nobel argentino, su esposa, Amanda Asijak, y el sacerdote formoseño Francisco Nazar, quien trabaja con las comunidades aborígenes de Formosa.
A la salida de la reunión, Nazar aseguró que el Papa "escuchó mucho y habló poco", a la vez que se mostró "muy firme" y "abierto al diálogo y a la construcción en paz". Asimismo, puntualizó que todos salieron "muy contentos después de 45 minutos de un diálogo muy importante".
Según la comunidad qom de Formosa, los representantes indígenas viajaron para expresarle al Papa "las graves violaciones a los Derechos Humanos que sufren los pueblos originarios en el continente latinoamericano". En ese sentido, la diputada de Libres del Sur Victoria Donda dijo en Buenos Aires que "ojalá que Cristina tome nota y reflexione" sobre los reclamos de la comunidad qom.
"Es muy importante que el mundo se entere que en nuestro país aún suceden este tipo de cosas. Y es una vergüenza que la Presidenta se niegue a recibirlos, ya con 10 años de gobierno, mientras que el Papa, a menos de seis meses de haber asumido, les dio un lugar de preferencia en su agenda", destacó la legisladora.
En una posterior rueda de prensa, Esquivel, comprometido con la causa de la comunidad indígena, destacó que el motivo del encuentro con el pontífice fue "acercar a la conciencia internacional el problema de las comunidades originarias y buscar así soluciones".
