Viernes 19 de Abril de 2013
Decenas de personas podrían haber muerto en la explosión que se produjo el miércoles en la fábrica de fertilizantes.
Estados Unidos prolongó una semana trágica con la explosión de una fábrica de fertilizantes en una pequeña localidad de Texas, el miércoles. Al menos 35 personas murieron, según informó ayer el alcalde de la ciudad West, Tommy Musaka, en una entrevista con USA Today. El asistente del gobernador de Texas, David Dewhurst, no confirmó la cifra en una entrevista con CNN y dijo que la búsqueda estaba aún en modo "rescate", pero podría pasar a modo "recuperación" hoy. Previamente, funcionarios estimaron que en la explosión habían fallecido entre cinco y quince personas. Hay más de 160 heridos en los hospitales y más de 1.000 personas fueron evacuadas. El presidente Barack Obama, que ayer asistió en Boston a una ceremonia de homenaje a las víctimas del atentado terrorista del lunes, brindó todo su apoyo a Texas.
Aunque se trata de un accidente, la policía investiga como si se tratara de un delito. "No hay pistas de algo que no sea un accidente o un incendio", dijo Swanton, rechazando el nerviosismo que cunde en el país tras el atentado en Boston y las cartas con veneno enviadas a un senador y a Obama.
La fábrica estaba en West, cerca de Waco, 100 kilómetros al sur de Dallas. A las 19.30 se informó de un incendio y 20 minutos más tarde se produjo la violenta explosión de un tanque que provocó que una lengua de fuego de 30 metros se elevara hasta el cielo. La sacudida fue tan grande que los sismólogos la clasificaron como un terremoto de magnitud 2,5 en la escala de Richter.
Imágenes de los sindicados
El FBI mostró ayer las fotos y un video de dos sospechosos de ser los autores del atentado terrorista que el lunes causó en Boston tres muertos y 176 heridos. Ambos jóvenes, blancos, con gorra de béisbol y cargados con mochilas, fueron fotografiados en el lugar poco antes de las dos explosiones, aseguró el agente del FBI Richard Des Lauriers. El jefe de la investigación afirmó que hay material, no mostrado al público, en el que se ve al sospechoso número dos, con gorra blanca, dejar su mochila en el lugar de la segunda explosión.
La publicación de las imágenes por parte del FBI (Oficina Federal de Investigación) llegó tras un día marcado por la ceremonia de homenaje a las víctimas en la catedral de Boston, a la que asistió Barack Obama. "Acabaremos la carrera", dijo Obama, que recordó la historia de la ciudad y de la fundación del país, así como sus años de estudiante de Derecho en la cercana Universidad de Harvard, por lo que se tomó el atentado como algo "personal". "Si buscaban intimidarnos, aterrorizarnos, sacudirnos, está claro que se equivocaron de ciudad", dijo Obama, que visitó a algunos de los heridos en los hospitales junto a su esposa Michelle. "Estaremos con ustedes mientras aprenden a levantarse, a caminar e incluso a correr de nuevo. No tengo duda de que correrán de nuevo", dijo sobre los muchos aficionados que contemplaban el final de la maratón, algunos de los cuales perdieron miembros.
