Martes 30 de Abril de 2013
Los senadores votarán hoy y de inmediato, el nuevo mandatario viajará para promover medidas económicas en la Unión Europea.
El jefe del Gobierno italiano, Enrico Letta, superó ayer en el Parlamento el primer voto de investidura a su recién constituido Ejecutivo de coalición al recibir la confianza de la Cámara de los Diputados con una amplia mayoría de apoyos.
Por 453 votos a favor, 153 en contra y 17 abstenciones, el Gobierno, que integran el Partido Demócrata (PD) de centroizquierda, el conservador Pueblo de la Libertad (PDL) de Silvio Berlusconi y la centrista Elección Cívica de Mario Monti, superó el primer voto de confianza a su investidura, previo al mismo trámite al que se someterá hoy en el Senado.
En las declaraciones de los grupos parlamentarios previas a la votación, el Movimiento 5 Estrellas, del cómico Beppe Grillo, confirmó su decisión de votar en contra, mientras que la Liga Norte anunció su intención de abstenerse, toda vez que PDL, Elección Cívica y PD expresaron su sí.
De los resultados se desprende que en el PD, al que pertenece Letta, no se ha roto la disciplina de partido como se temió durante los últimos días, debido a la división interna que existe en el seno de la formación y evidenciada durante la reelección del jefe del Estado, Giorgio Napolitano.
Directo a Berlín, Bruselas y París
De esta manera Letta comenzó ayer oficialmente la actividad parlamentaria de su Ejecutivo con un discurso de investidura en la Cámara Baja (llevado también al Senado para acelerar la votación de hoy) en el que, tras los agradecimientos, entre otros a quien fuera su jefe en el PD, el dimisionario Pier Luigi Bersani, abordó de lleno la cuestión europea como necesaria para la recuperación económica de Italia.
En este sentido, el nuevo primer ministro italiano anunció que, una vez que haya recibido el voto de confianza del Parlamento, emprenderá de inmediato un viaje a Berlín, Bruselas y París para promover medidas en la Unión Europea (UE) que impulsen el crecimiento económico sin comprometer el equilibrio presupuestario.
Letta, hasta hace unos días vicesecretario del PD, apostó por una mayor integración en la UE, con una unión bancaria y una mayor unión política, sin las cuales se hará "insostenible" esta crisis, que ha motivado que Italia cerrara 2012 con una caída del PIB del 2,4 % y la tasa de desempleo fuera del 11,6 % en febrero.
"Las premisas macroeconómicas son las del euro y el Banco Central Europeo. Solo con el saneamiento (de las cuentas públicas) Italia muere. Las políticas para el crecimiento no pueden esperar. No hay más tiempo. Muchas familias y ciudadanos están sumidos en la desesperación", agregó.
Europa y la economía fueron los dos asuntos principales que vertebraron el discurso de un Letta que enumeró una serie de reformas de las que pretende obtener resultados, dando prioridad a la creación de empleo, en un plazo de 18 meses, pues de lo contrarió, advirtió, "habrá consecuencias".
"Este es un Gobierno al servicio del país, dije que el Gobierno no debía nacer a cualquier precio y no tengo intención de sobrevivir ni de ir tirando a cualquier precio", aseveró.
Entre las primeras medidas de su Gobierno se encontrará la supresión del salario como ministro a quienes ya sean parlamentarios, así como la suspensión del pago en junio del impuesto sobre la vivienda habitual que reintrodujo el ex primer ministro tecnócrata Mario Monti.
En materia de impuestos, el nuevo primer ministro apostó por rebajar la presión fiscal, sobre todo a las rentas del trabajo, sin descuidar las cuentas públicas de un país que cerró en 2012 con un una deuda del 127 %.