Martes 3 de Diciembre de 2013
Se trata de supermercados ubicados en la periferia de la capital cerraron sus puertas para prevenir más saqueos ante ausencia de seguridad a raíz del "acuartelamiento" que lleva adelante la Policía por mejores salariales.
"La decisión de cerrar es en defensa propia. Son unos 10 los supermercados que han cerrado las persianas; se trata, sobre todo, de los ubicados en las zonas más periféricas", aseguró esta tarde a la prensa el vicepresidente de la Cámara de Supermercados de Córdoba, Benjamín Blanch.
El ejecutivo insistió en el mismo concepto: "estamos muy preocupados y atemorizados por lo que pasó con dos supermercados Cordiez. Por eso la decisión es cerrar en aquellos lugares en los que, en las inmediaciones, se advierte algún movimiento raro".
Blanch subrayó que, frente a lo sucedido, las autoridades policiales enviaron "algunos patrulleros e, incluso, manifestaron su voluntad de sacar bomberos (a la calle) si fuera necesario, para custodiar y salir del paso".
Por su parte, Lucas Almada, responsable del supermercado Cordiez, ubicado en la avenida Vucetich al 6.700, en el Barrio Ituzaingó, aseveró que dicho local "fue saqueado en dos ocasiones, a las 16.45 y a las 17.30".
"En la primera ocasión, había repositores trabajando dentro del local. No obstante, llegaron unas 20 personas, rompieron vidrios con piedras y palos, y se llevaron computadoras, cajas registradoras, bebidas y todo lo que encontraban al paso. Luego volvieron e hicieron lo mismo", puntualizó el ejecutivo.
En el mismo sentido, Almada enfatizó: "aprovecharon la falta de policías para actuar. Hoy ya no vamos a volver a abrir, porque robaron hasta las máquinas registradoras, además de computadoras y mercaderías".
Otro grupo de 50 personas también protagonizó algunos saqueos en otro supermercado de la misma firma (Cordiez), ubicado en la avenida Ricchieri al 4.200, en el barrio SEP, a pocas cuadras del lugar donde los policías mantienen un acuartelamiento en reclamo de mejoras salariales.
Mientras tanto, funcionarios del gobierno cordobés mantuvieron esta tarde conversaciones con representantes de los policías que desde esta mañana protestan y que se encuentran "acuartelados" en una de las sedes del Comando de Acción Preventiva (CAP) de la fuerza provincial.
Si bien los representantes de los efectivos elogiaron la buena predisposición del jefe de la fuerza, César Almada, anticiparon que continuarán con la protesta, tanto en la capital como en el interior (en Villa María y en Colonia Caroya, por ejemplo), mientras no haya una respuesta a la demanda salarial.
Esta mañana, uno de los voceros de los efectivos, que prefirió no identificarse, había manifestado: “lamentablemente, no quedaba otro camino que la protesta porque hasta el momento nuestros reclamos no han sido escuchados”.
La protesta, según el mismo vocero, hizo que “los bancos estén sin los policías que suelen hacer adicionales", y del mismo modo “no hay controles en las rutas ni en las calles de la ciudad de Córdoba”.
Los policías realizan un acuartelamiento en reclamo por mejoras salariales y en las condiciones de trabajo desde primera hora de hoy, todo lo cual acontece ante la ausencia del mandatario en la provincia.
Según fuentes del gobierno provincial, el gobernador José Manuel De la Sota, que había viajado rumbo a Colombia para participar de una reunión de mandatarios provinciales, emprendió el regreso a Córdoba al enterarse de lo sucedido desde la madrugada de hoy; en horas de la tarde, se encontraba en una escala en Panamá, por lo que aún se desconoce su horario de arribo.