Viernes 17 de May de 2013
Martilleros y operadores del sector esperan la puesta en marcha de las medidas nacionales para evaluar su impacto. Advierten sobre incertidumbre en el comprador.
Martilleros y operadores inmobiliarios de la provincia reciben con expectativa "cualquier medida que sirva para reactivar el sector", aunque admiten que existen "ciertas dudas" sobre el proyecto de ley impulsado por el Gobierno nacional que busca ingresar dólares al circuito legal, a través de la emisión de dos bonos –Cedin y BADE-, uno de los cuales apunta a relanzar la construcción.
Según manifestaron empresarios inmobiliarios, la iniciativa se espera con "relativa" cautela, ya que aún no es posible dimensionar el impacto real de la medida, aunque reconocen que frente a un mercado casi paralizado "cualquier decisión que se proponga inyectar capitales al sector, será beneficiosa". Sin embargo, algunos coinciden en que esta situación provoca además "cierta incertidumbre" en el comprador, quien esperará a sentirse seguro para invertir.
De hecho, durante los primeros cuatro meses en la provincia cayó un 33 por ciento el número de operaciones inmobiliarias en relación a 2012.
En ese sentido, el titular del Colegio de Escribanos de la provincia, Jorge Mateo, estimó que si bien "el mercado inmobiliario no está paralizado, tampoco reacciona".
Desde la Cámara Inmobiliaria bonaerense (CIBA), Jorge Autino indicó a DIB que "pese al desconocimiento de los detalles del proyecto, las perspectivas son positivas". Y agregó: "Aunque la medida no tenga gran impacto, tampoco va a ser negativa, y lo recomendable es ser cautos y esperar a que se trate en el Congreso". En esa línea, desde la delegación bonaerense de la Cámara de la Construcción, también se pronunciaron a favor de la emisión del Cedin y manifestaron que "todo aquello que contribuya a generar una reactivación del mercado inmobiliario será beneficioso".
Impacto
Autino aseguró que las operaciones "continúan en baja" y arriesgó que "un 90 por ciento del mercado se encuentra paralizado desde el año pasado", cuando se anunciaron las restricciones al flujo de divisas extranjeras, situación que generó un gran impacto en la compra y venta de inmuebles, que históricamente utiliza dólares para la comercialización. En ese sentido, los operadores inmobiliarios consultados señalaron que, frente a la disparidad entre el dólar oficial y el paralelo, hoy en día resulta muy dificultoso llegar a un acuerdo con el comprador.
El proyecto de ley impulsado por el Gobierno nacional buscará ingresar dólares no declarados al circuito legal, a través de dos instrumentos financieros -los bonos BADE y Cedin (Certificado de depósitos para la inversión)- orientados a dinamizar la inversión en el sector energético y de la construcción, respectivamente. En tanto, mientras el Cedin representará depósitos en dólares y será emitido por el Banco Central, el BADE, también en moneda estadounidense, cotizará en el mercado de capitales con vencimiento en 2016.
