Jueves 17 de Junio de 2021
Se trata de una edición limitada, fruto del trabajo articulado entre investigadores del INTA, agricultores de la Puna de Jujuy y una empresa de Balcarce. El proyecto se enfoca en el aprovechamiento de estos tubérculos nativos.
Por segundo año consecutivo, la empresa Gauchitas SA lanzó al mercado una edición limitada del mix con papas andinas, triplicando el volumen de la primera edición. Estos chips se destacan por estar elaborados con papas nativas de alto valor nutricional y cualidades de alimento funcional, por el alto contenido de antioxidantes, proteínas y minerales.
Esta nueva producción se elaboró a partir de papa cultivada en la puna de Jujuy –a más de 3.500 metros de altura sobre el nivel del mar–, donde se utilizó un mix de Moradita –violeta–, Santa María –rojiza– y de la variedad Atlantic –de color claro– que se cosechó en la localidad de Balcarce –provincia de Buenos Aires–, generando así un contraste cromático.
Se logró triplicar la producción de papas andinas fritas, “al mejorar la capacidad productiva de los agricultores y ampliando la superficie de siembra de las papas seleccionadas en Jujuy”, destacó Sergio Feingold, coordinador del Programa Nacional de Biotecnología y responsable del Laboratorio de Agrobiotecnología de la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Balcarce del INTA.
Se trató de un paso importante sumado a que “el beneficio económico de los cinco productores involucrados generó expectativas en otros productores quienes manifestaron el deseo de sumarse a este proyecto”.
Feingold destacó que este aumento de la producción de la empresa Gauchitas, “permite pensar en satisfacer la demanda de grandes cadenas de venta al público consumidor y, en un futuro, abrir nuevos mercados nacionales como de exportación a partir del aumento de las capacidades productivas en origen”.
Constituida como la primera y única fábrica de papas fritas snacks de Balcarce, utiliza ingredientes naturales en su proceso productivo (kettle) diferente al freído continuo, obteniendo como resultado un producto más crocante y de apariencia más artesanal.
Este producto es resultado de más de 13 años de trabajo entre el INTA y los agricultores jujeños, permitiéndoles unirse a la empresa para llevar a las góndolas este snack de alto valor nutricional, calidad diferenciada y de origen regional.