Miércoles 12 de Septiembre de 2018
Un pescador deportivo halló el buque Carmen Ligera, a unos 200 metros del cauce principal del río Paraná, en un sector conocido como Cancha del Dorado. Se trata de una barcaza de madera que se incendió en la noche del 21 de agosto de 1921.
“El pescador Domingo Novaro pudo ver la proa de este buque de madera que es a todas luces antiguo y le sacó fotos; luego, las subió al Facebook y, de esa manera, nos enteramos en el Museo e iniciamos la investigación junto a Fernando Chiodini, el historiador del grupo”, explicó el director del Museo de San Pedro, José Luis Aguilar, a la Agencia CTyS-UNLaM.
“Nos pusimos a buscar naufragios que hubieran ocurrido en esta zona, frente a San Pedro, desde el año 1900, y solo había registro de un lanchón comercial que navegaba desde Buenos Aires hacia el Puerto de Corrientes con la carga completa y, en la noche del 21 de agosto de 1921, se incendió cuando pasaba por este sitio ubicado entre San Pedro y Baradero”, precisó.
Fue posible reconstruir la historia completa gracias a los registros de Prefectura Naval. “Debemos nuestro especial agradecimiento al prefecto de San Pedro, Alejandro Hereñú, quien corroboró en los documentos oficiales de 1921 este suceso”, manifestó Aguilar.
Según los documentos vinculados al incendio del Carmen Ligera, aquella noche del naufragio, la tripulación pudo salvarse en un bote y, posteriormente, fue rescatada por un buque de carga que la trasladó hasta el puerto de San Pedro.
De las observaciones realizadas por el equipo del Museo de San Pedro, se desprende que, cuando el incendio comenzó a generalizarse, el capitán decidió acercar el buque lo más posible a la costa. Por fortuna, no hubo víctimas fatales.
Con la confirmación de que se trataba del Carmen Ligera, Aguilar se dirigió al lugar del hallazgo junto con otro integrante del Museo, Javier Saucedo. “Llegamos al sitio en lancha y anclamos en la boca del arroyo; los últimos 200 metros los hicimos en kayak porque, en esta parte, por la bajante del río, la profundidad es muy escasa”, relató el director.
Según indicó Aguilar, la madera resistió bastante bien el embate del río durante casi un siglo. “La barcaza se encuentra semi enterrada y estimamos que se continuará llenando con un sedimento bastante negro con las crecidas del río hasta quedar completamente tapada”.
En el barco, hallaron un fragmento metálico que había sufrido un fuego muy intenso, lo cual coincide con la crónica del incendio. El director del Museo de San Pedro observó: “Es como si el Carmen Ligera hubiera querido mostrarse en los días de cumplirse un nuevo aniversario de su hundimiento”.
Cuando el río tenga su próxima crecida, el barco será cubierto nuevamente y, una vez que el sedimento lo haya tapado, quedará enterrado para siempre.