Martes 9 de Abril de 2013
La exprimera ministra británica será despedida en un funeral ceremonial con honores militares la semana próxima.
La exprimera ministra conservadora británica Margaret Thatcher, que transformó y dividió con la misma profundidad a su país, falleció ayer en Londres como consecuencia de un derrame cerebral a los 87 años.
La llamada "Dama de Hierro" murió "tranquilamente" en la habitación del hotel Ritz de Londres, donde residía en forma temporal, según anunció su portavoz Lord Tim Bell. Dirigentes de todo el mundo rindieron homenaje a la primera y hasta ahora única jefa de Gobierno que ha tenido el Reino Unido y que más de dos décadas después de dejar el poder sigue suscitando tanta admiración como odios.
"Hemos perdido a una gran dirigente, una gran primera ministra y una gran británica. Margaret Thatcher no sólo lideró nuestro país, sino que salvó a nuestro país", proclamó el actual primer ministro David Cameron, quien acortó su minigira europea para regresar directamente a Londres desde Madrid.
La reina Isabel II de Inglaterra se declaró "triste", según el palacio de Buckingham, que como la mayoría de los edificios oficiales británicos hizo ondear su bandera a media asta.
Thatcher, que llevaba una década apartada de la vida pública debido a diversos problemas de salud, permaneció en el cargo durante 11 años, entre 1979 y 1990, todo un récord en su país. Veintitrés años después de su salida de Downing Street, sin embargo, la implacable defensora del conservadurismo político y del ultraliberalismo económico sigue siendo una figura ineludible en la política británica, aunque su legado divide profundamente a los ciudadanos. El parlamento, que se encontraba en receso, se reunirá hoy para rendir homenaje a la baronesa Thatcher, que formalmente conservaba un escaño en la Cámara de los Lores.
En tanto, Margaret Thatcher será despedida "la próxima semana" en un "funeral ceremonial" con honores militares en la catedral londinense de San Pablo, que será seguido de una "incineración privada", según anunció Downing Street en un comunicado sin precisar por ahora el día exacto. Esto significa que no tendrá funerales de Estado.
Licenciada en Química, ejerció como abogada tras su matrimonio con Denis Thatcher en 1951, antes de iniciar su carrera política con su elección como diputada a la Cámara de los Comunes en 1959, a los 34 años. En 1975 asumió el liderazgo del partido Conservador, y en mayo de 1979 ganó las elecciones contra unos laboristas desgastados. Thatcher se retiró al cabo de tres mandatos, pero su salud comenzó a deteriorarse pocos años después, y ya más seriamente tras la muerte de Denis, con quien tuvo a los gemelos Carol y Mark, que le afectó mucho.
Su hija Carol reveló en 2008 que su madre sufría de demencia senil, y que los médicos le habían aconsejado dejar de hablar en público varios años antes tras varios ataques cerebrales. En 2010, Thatcher fue hospitalizada en Londres durante 15 días después de una gripe que se complicó, y en diciembre pasado tuvo que ser internada nuevamente para ser operada de un tumor en la vejiga.
Abanderada del neoliberalismo
Siguiendo sus convicciones políticas y económicas, Thatcher privatizó industrias, recortó drásticamente el gasto público, desmanteló partes importantes del Estado de bienestar, bajó los impuestos y debilitó a los sindicatos. Con su política neoliberal, provocó un fuerte aumento del desempleo -se llegaron a superar los tres millones de desocupados- y enfrentó graves conflictos sociales, como la larga huelga de mineros que reprimió severamente en 1984. Al mismo tiempo, esta mujer asociada para siempre en la memoria colectiva a sus trajes azul eléctrico, trató de convertir a un Reino Unido venido a menos en potencia internacional.
En la página más dolorosa vinculada a Argentina, en 1982, envió el mayor destacamento naval desde la Segunda Guerra Mundial -más de 100 buques y unos 27.000 hombres- para reconquistar las islas Malvinas, tras la invasión protagonizada por una dictadura militar argentina agonizante, provocando una ola de patriotismo en el país y encarrilando su reelección al año siguiente.
Movida por una desconfianza casi visceral hacia Europa, fue amiga de los presidentes de Estados Unidos, Ronald Reagan, considerado por muchos como su hermano ideológico, y soviético, Mijaíl Gorbachov, y desempeñó un papel importante en la última etapa de la Guerra Fría.
Repercusiones
La muerte de "La Thatcher" generó condolencias, apatías y críticas entre jefes de estado y ciudadanos. Estados Unidos perdió a una "verdadera amiga", que "como partidaria sin complejos de nuestra alianza transatlántica, sabía que con fuerza y determinación podíamos ganar la Guerra Fría y extender la promesa de libertad", declaró el presidente de Estados Unidos Barack Obama, quien como sus predecesores rindió un cálido tributo a la exprimera ministra. Mijaíl Gorbachov elogió a una "gran política" y una "persona brillante", que "quedará en la historia".
La canciller alemana, Angela Merkel, la calificó de "líder extraordinaria de nuestra época" que jugó un papel fundamental en la superación de las divisiones durante la Guerra Fría en Europa.
El jefe de Gobierno español, Mariano Rajoy, salió también a resaltar la figura de la exlíder conservadora por su "firme determinación reformista" y que dejó un "legado valiosísimo" a los actuales líderes europeos.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, señaló que Thatcher contribuyó a lograr que la libertad y la democracia pudieran llegar a todos los rincones del mundo."Ella hizo una gran contribución a la caída del muro de Berlín, de la Cortina de Hierro y a lograr que la libertad y la democracia pudieran llegar a todos los rincones del mundo", señaló el mandatario trasandino.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, lamentó la muerte de la "controvertida" y "valiente" exprimera ministra a quien consideró "amiga" de su país.
El recuerdo de Francisco
El papa Francisco destacó los "valores cristianos" de la exprimera ministra británica Margaret Thatcher, según indicó el secretario de Estado vaticano Tarcisio Bertone, el segundo funcionario de mayor rango del Vaticano, en un telegrama al premier David Cameron. Bertone indicó que el Papa se mostró entristecido por la noticia de la muerte de Thatcher y "recuerda con aprecio los valores cristianos que respaldan el compromiso (de Thatcher) con el servicio público y la promoción de la libertad entre la comunidad de naciones".
"Encomendando su alma a la misericordia de Dios y asegurando a su familia y al pueblo británico que la recordará en sus plegarias, el Santo Padre pide abundantes bendiciones para todos aquellos cuyas vidas ella tocó", remarcó el telegrama.