Martes 13 de Agosto de 2013
Uno de ellos es el joven Santiago Laguía, oriundo de Pergamino, quien estaba abrazado a una mujer en el hueco de los ascensores. En medio de la emoción, los Bomberos se despidieron del lugar.
El hallazgo de otros tres cadáveres entre los escombros del edificio que explotó en Rosario, elevó a 21 la cantidad de víctimas mortales, con lo cual se convirtió en la peor tragedia en la historia de la ciudad. Luego de identificar a las tres nuevas víctimas, entre ellas el joven pergaminense Santiago Laguía, los Bomberos dieron anoche por finalizado el rescate, en medio de un clima de emoción, que incluyó abrazos con los familiares y el aplauso de los vecinos.
Tras casi una semana de trabajo, los rescatistas encontraron por la mañana el cuerpo de Lidia D'Avolio, de 86 años y residente en el edificio de la calle Salta 2141. Cerca de las 14, y con ayuda de una pala mecánica, pudieron recuperar los cadáveres de dos jóvenes rubios, un hombre y una mujer, que "estaban abrazados en el hueco de uno de los ascensores" del edificio que implosionó, dijeron fuentes que participaron de la búsqueda.
La recuperación de los cadáveres se demoró varias horas por las dificultades para acceder a ellos y por el peligro de derrumbe que persiste entre los restos de los edificios. Los fallecidos fueron reconocidos como Luisiana Contribunale y Santiago Laguía por sus familiares que rompieron en llanto al comprobar que se trataba de la odontóloga de 33 años y el estudiante de medicina de 25 que vivían en el octavo piso.
La escena generó gran conmoción en el predio y emocionó a los rescatistas que esperaban hasta último momento hallar con vida a los jóvenes. Luego, los Bomberos hicieron sonar las sirenas de las autobombas para dar por finalizada la búsqueda, y se retiraron emocionados, en medio del aplauso de vecinos y de quienes se acercaron al lugar para seguir de cerca los rastrillajes.
Bomberos, policías y autoridades coincidieron en señalar que la del edificio de la calle Salta se convirtió así en la "peor tragedia de la historia de Rosario", dado que hasta comprobarse la muerte de 21 personas por la explosión tras un escape de gas, el único antecedente anterior era el del incendio de un pub en 1979, donde murieron 15 jóvenes.
El secretario de Salud municipal, Leonardo Caruana, confirmó que los cadáveres serán sometidos a una autopisa en el Instituto de Medicina Legal de Rosario. Además, señaló que "nueve personas" seguían internadas en distintos hospitales de la ciudad y añadió que todos "evolucionaban favorablemente".
Las tareas de remoción de escombros se complicaron durante la madrugada de ayer, cuando una pala mecánica provocó la explosión de un tanque de nafta de un automóvil que había quedado aplastado bajo los edificios derrumbados. Si bien no se produjeron heridos, el estallido del tanque provocó sobresaltos entre los vecinos del edificio, y obligó a los rescatistas a suspender las tareas durante unas cuatro horas.
El objetivo de los trabajos era llegar a la zona donde se encontraban las cajas de los ascensores, lugar donde se presumía, y con razón, que podría haber alguna otra víctima de la explosión.