Martes 17 de Septiembre de 2013
Desde el massismo criticaron la "improvisación" del Gobierno en la prevención del delito, mientras que intendentes K defendieron la designación del ministro de Seguridad.
Dirigentes del Frente para la Victoria y el Frente Renovador que lidera Sergio Massa volvieron a cruzar ayer duras críticas y acusaciones en torno a la inseguridad y, otra vez, los intendentes de ambos espacios ganaron protagonismo al polemizar por las últimas medidas para combatir el delito adoptadas por el oficialismo.
Sin medias tintas, el propio Massa sostuvo que en la provincia de Buenos Aires "la gente tiene miedo y siente que está en la lista de espera de los delincuentes". En relación al nuevo ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados, indicó que "necesitamos que le vaya bien" y reclamó debatir problemas clave como la inseguridad, inflación y carga impositiva porque "hoy hablar de 2015 es burlarse de la gente".
En línea con el intendente de Tigre, su compañero de lista, Darío Giustozzi, criticó las nuevas iniciativas en materia de seguridad llevadas adelante por el Gobierno nacional en conjunto con la administración bonaerense a las que calificó de "contradictorias" y "sin planificación" que se realizan "por intereses electorales".
El intendente de Almirante Brown sostuvo que desde el Frente Renovador "estamos observando una improvisación en la política de seguridad del Gobierno, se están tomando por intereses electorales medidas sin planificación, contradictorias, y eso nos preocupa porque no da respuesta efectiva al problema de la inseguridad".
Réplica de intendentes
En tanto, intendentes del FpV del Conurbano salieron a cruzar duro al massismo tras respaldar nuevamente al flamante ministro Granados, como lo hicieron el día de la asunción formal.
El intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, criticó a su par de Tigre, Sergio Massa, y dijo que cree "ser modelo en seguridad" cuando "la mayoría de los habitantes (de su distrito) vive en countries que no aportan nada y se manejan en un sistema de seguridad privado".
Del mismo modo, el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, dijo que prefiere a los dirigentes que "quieren demonizar" a Cristina Fernández de Kirchner "antes que a esos que dicen que están todo bien y que nunca se pelean con los intereses económicos", remarcó en lo que pareció una crítica al tigrense.
Al mismo tiempo, el intendente de San Vicente, Daniel Di Sabatino, hizo hincapié en la designación de Granados. "Cada uno de los intendentes tiene una personalidad muy fuerte producto de la toma de decisiones constantes y de enfrentar situaciones siempre complejas. No somos débiles, ni suaves, ni señoritas, somos hombres con fuerza y carácter. Eso no es mano dura, eso es estar preparado para tomar decisiones", sostuvo y defendió así a Granados de las críticas contra el ex intendente de Ezeiza, tildado como un "duro" por la política de seguridad desplegada en su distrito y el tiroteo que protagonizó con delincuentes a fines de los '90.
Por su parte, la legisladora bonaerense Leonor Granados -que rompió con el FpV y se pasó al massismo- respondió a Ferraresi al indicar que "tan solo el 7 por ciento de la población de Tigre vive en barrios cerrados". "Si los niveles de inseguridad son bajos, se debe a que se aplican políticas serias y responsables con el dinero de los contribuyentes", sostuvo la hermana "rebelde" del ministro Granados.
