Viernes 5 de Julio de 2013
Durante un encuentro organizado para despedir a la embajadora Vilma Martínez, el secretario de Comercio Interior acusó y amenazó a los cronistas del diario Clarín.
El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno armó un escándalo ayer en la residencia de la embajadora de los Estados Unidos, Vilma Martínez al acusar "a los gritos" y ante decenas de testigos, a los periodistas del diario Clarín, Silvia Naishtat y Walter Curia de "tener las manos manchadas con sangre".
En medio de la tradicional celebración del 4 de julio y como último acto protocolar de la actual embajadora, Naishtat relató que se encontró con Moreno y que debido a que "hallarlo es muy difícil y tenerlo allí era el momento para preguntarle", pretendió conocer su opinión sobre los precios y el desabastecimiento.
Entonces el funcionario, le respondió: "usted debería pedirme permiso y decirme... señor secretario, ¿usted quiere hablar conmigo?".
La periodista explicó por radio Ciudad que "no me había dado cuenta que Moreno levantaba la voz y entonces llegó Walter Curia y le dijo al secretario ‘no le levante la voz a la señora’".
A partir de ese momento, Moreno se desorbitó y le exigió a Curia: "Preséntese" y cuando el periodista lo hizo con su nombre, apellido y el medio al que representaba, "a los gritos Moreno nos dijo a ambos que tienen las manos manchadas con sangre todos los que trabajan para (Héctor) Magnetto", contó
Naishtat. Luego, la editora de Clarín agregó que el funcionario la amenazó a ella y a Curia con "decirle lo mismo a la señora embajadora", en relación a que había invitado a periodistas de ese medio y refirió que "había otros colegas y vieron todo. El episodio fue la comidilla de la reunión", agregó.
"Vida complicada"
La embajadora de los estados Unidos, Vilma Socorro Martínez caracterizó ayer a Argentina como "un país de vida complicada" y señaló que en la relación bilateral "el origen de ciertos problemas puede encontrarse en las diferentes interpretaciones de hechos básicos que los hacen difícil de resolver".
En un discurso que pronunció en la residencia de los embajadores en el barrio de Palermo, Martínez combinó la celebración del Día de la Independencia de su país con la despedida de su misión en el país y señaló que "ha sido un verdadero honor representar a mi país en su país".
La representante diplomática del Gobierno del presidente Barack Obama, explicó que "en estos últimos cuatro años, hemos trabajado en pos de una relación madura entre ambos países, más ajena a las circunstancias del momento, tratando de permanecer enfocados en intereses sólidos a más largo plazo".
Al respecto, señaló que "apreciar el cuadro general, a veces, no es tan fácil como parece" y afirmó que "la vida argentina es complicada, como ustedes dicen".
Martínez explicó que aprendió "a apreciar las complejidades de la sociedad y de la política argentina y que el origen de ciertos problemas puede encontrarse en las diferentes interpretaciones de hechos básicos que los hacen difícil de resolver".
En un nutrido cóctel con representantes del cuerpo diplomático, muchas figuras famosas y periodistas, políticos de la oposición y casi ningún miembro del oficialismo, salvo la polémica presencia de Guillermo Moreno, la embajadora no se privó de reseñar los hechos y sectores de colaboración entre los dos países, que llamó haber "fortalecido la relación".
