Martes 6 de Agosto de 2013
Un asalto a la vivienda del intendente de Tigre provocó un fuerte cimbronazo político. El FR deslizó presunta intencionalidad política y el Gobierno asegura que se "ocultó" el hecho.
El tramo final de la campaña hacia las primarias del próximo domingo se enturbió ayer al trascender los detalles de un llamativo robo ocurrido 15 días atrás en la casa del intendente de Tigre y candidato a diputado por el Frente Renovador (FR), Sergio Massa, situación que generó duras acusaciones cruzadas entre ese sector político y el oficialismo.
Así, mientras en el entorno del tigrense deslizaron una presunta intencionalidad política detrás del hecho, por el que hay un prefecto detenido, el secretario de Seguridad nacional, Sergio Berni, dijo que el acusado "era conocido de la familia" Massa, más precisamente "puntero político y remisero" del jefe comunal. Para el funcionario nacional, Massa "ocultó" un hecho de inseguridad "para sacar rédito político o esconder estadísticas". Desde el gobierno de Scioli aseguraron que se trató de un robo "típico de un country".
El caso
El hecho ocurrió el 20 de julio pasado, aunque trascendió recién el domingo en el diario Página 12. En la nota, firmada por el periodista Horacio Verbitsky, se indicó que Massa, que tiene como "caballo de batalla" en la campaña la seguridad, no había dado a conocer el robo porque perjudicaba su imagen.
Frente a esto, Massa convocó de urgencia a una conferencia de prensa que se realizó ayer a la mañana donde sostuvo que el robo a su casa del barrio cerrado Isla del Sol, en Rincón de Milberg, Tigre, "fue un hecho de inseguridad esclarecido", aunque deslizó sus sospechas de intencionalidad política: "Si alguien piensa que con esto nos íbamos a asustar o nos iban a amedrentar, se equivocan", sostuvo sin más precisiones.
El ex jefe de Gabinete kirchnerista indicó que no dio a conocer antes la noticia del robo porque se "lo pidió el fiscal" del caso, Mariano Magaz.
Su mujer y funcionaria municipal, Malena Galmarini, afirmó directamente que "no fue un hecho de inseguridad normal" y agregó que "hace 15 años que vivo ahí con la seguridad de Prefectura y la persona entró tranquilamente. El fiscal tendrá que decirme qué pasó", afirmó.
El hecho ocurrió cuando el prefecto Alcides Díaz Gorgonio, que integra un grupo de enlace coordinado por el Ministerio de Seguridad, ingresó armado a la vivienda a las 18.45, 15 minutos después de que saliera Malena Galmarini y la casa quedara sola. El prefecto disparó con un arma calibre 22 con silenciador contra una cámara de seguridad y se llevó dinero en pesos y en dólares y pendrives con información de la gestión del intendente, entre otras pertenencias.
A partir de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, la Policía detuvo al prefecto doce horas después y recuperó todo lo robado. Ayer, Massa dio a conocer las imágenes y contó que hay un pedido de captura para otros dos agentes de esa fuerza de seguridad, que permitieron el ingreso del ladrón al barrio.