Jueves 22 de Diciembre de 2016
Nicolás Martínez es panadero y vive en Bariloche y hace 22 años que repite la misma tradición: hornear panes dulces que luego regala a familias humildes, merenderos e instituciones necesitadas. Amasa hasta quince horas por día. Este año pretende hacer más de 10.500 panes dulces para superar su marca del año pasado.