Miércoles 17 de Agosto de 2016
Un empresario minero mendocino recibió la órden de clausura para que no sigue extrayendo minerales de su cantera ya que no cumplía con las normas de protección al medio ambiente, pero por segunda vez consecutiva, desobedeció la órden y continuó con su trabajo. Una fiscal lo imputó por desobediencia. La postura del empresario refleja cómo se maneja la industria minera en el país, trasgrediendo siempre las normas ambientales.