Sábado 5 de Octubre de 2013
Los padres de Nicolás, de 16 años, le escribieron a Francisco en su nombre, porque una enfermedad le impide hablar y moverse. El pontífice eligió esas palabras para leer en la homilía.
En el marco de su histórica visita a la ciudad de Asís, en Umbria, centro de Italia, el papa Francisco leyó ayer una carta que le envió un joven discapacitado de Buenos Aires, cuya familia recibió con "alegría" y "sorpresa" la noticia desde la ciudad natal de Jorge Bergoglio.
Francisco quiso proponer "algo personal" al leer una de las miles de cartas que recibe por día -a la que definió como "una de las más bellas que he recibido"- durante la visita que realizó al Instituto Seráfico de Asís, donde besó y abrazó a chicos con enfermedades y discapacidades.
"Querido Francisco: soy Nicolás y tengo 16 años. Como no puedo escribirte yo (porque todavía no hablo ni camino), pedí a mis padres que lo hagan en mi lugar, porque ellos son las personas que más me conocen", comienza la misiva del adolescente.
La mamá de Nicolás, Marisa Marasco, contó que la carta la escribió ella porque el joven -que sufrió de hidrocefalia al nacer y parálisis cerebral- no puede expresarse pero "tiene la capacidad de hacerse entender". "Tengo la absoluta seguridad de que lo que escribí en la carta es lo que Nico siente y piensa, porque para las mamás es fácil percibir lo que el hijo siente", contó Marisa todavía emocionada y reveló que -entre los balbuceos que el chico empezó a pronunciar- dice claramente "Papa" y "no por su padre sino por Francisco".
Nicolás se atiende en la Asociación en Defensa del Infante Neurológico- en el barrio porteño de Colegiales- la institución más prestigiosa del país para chicos con patologías neurológicas, y la familia vive en Floresta. En la carta, la familia cuenta que el joven recibió este año su primera comunión y que en noviembre recibirá el sacramento de la confirmación. "Todas las noches, desde que me lo pediste, le pido a mi ángel de la guardia -que se llama Eusebio y tiene mucha paciencia- que te cuide y te ayude. Me gustaría mucho ir a verte y recibir tu bendición y un beso: sólo eso. Te mando muchos saludos y sigo pidiendo a Eusebio que te cuide y te dé fuerza. Besos. Nico", concluye.
Consejos
En otro tramo de su discurso en Asís, el Papa aconsejó a las madres que se lamentan de que sus hijos no se casan que dejen de planchar sus camisas. Y a quienes deciden unirse en matrimonio, les recomendó: "Pensemos en nuestros padres, nuestros abuelos y nuestros bisabuelos: se casaron en condiciones mucho más pobres que las nuestras, algunos en tiempo de guerra o de posguerra; algunos emigraron, como mis padres", comentó Francisco.
Además, volvió a realizar un fuerte llamado para que "cesen los conflictos armados que ensangrientan la tierra, que callen las armas y en todas partes el odio ceda el puesto al amor, la ofensa al perdón y la discordia a la unión".
