Viernes 6 de Septiembre de 2013
Máximo Enrique Reynoso, de 54 años, era sargento retirado de la Federal. Lo mataron delante de su mujer en Ramos Mejía. En el tiroteo también falleció uno de los delincuentes. Hay una detenida.
Reynoso es el agente número 23 muerto a balazos en lo que va del año.
Un policía fue asesinado a balazos delante de su esposa al tirotearse con ladrones que le robaron una camioneta cuando llegó a su casa en Ramos Mejía, partido de La Matanza, donde antes de morir alcanzó a matar a uno de los delincuentes. Minutos después fue apresada una joven de 22 años en Lomas del Mirador y un tercer integrante de la banda, hermano del ladrón fallecido, logró escapar. Un jefe policial informó que el efectivo muerto es el sargento retirado de la Policía Federal Máximo Enrique Reynoso, de 54 años, casado y padre de un chico de corta edad.
El hecho comenzó la noche del miércoles, alrededor de las 23, cuando el agente se disponía a guardar su camioneta Renault Duster en un garaje situado frente a su vivienda de la calle Temple 2350. Cuando la pareja aún estaba en el estacionamiento aparecieron en escena tres hombres armados a bordo de un automóvil Volkswagen Bora con intenciones de robo. Al ser sorprendido por los delincuentes, el policía se dio a conocer y se enfrentó a los tiros con los asaltantes, hasta que cayó herido en la calle de un tiro en el pecho. En tanto, sus atacantes escaparon en su camioneta y en el Bora, uno de ellos con al menos un impacto de bala.
Según se informó, Reynoso fue llevado de urgencia al Hospital Santojanni de la Capital Federal, donde murió. La Policía, alertada, localizó a los ladrones en la calle Nazca de Lomas del Mirador, frente a la villa Santos Vega, a unas quince cuadras del lugar donde mataron al oficial. En la calle Coronel Suárez al 1100, de Villa Madero, desde la camioneta Duster arrojaron al delincuente herido de bala, que fue llevado también al Santojanni, donde murió. Según la Policía, se trata de un asaltante conocido en la zona, de 26 años, cuya novia fue apresada más tarde, acusada de haber participado del hecho. En tanto, el hermano del fallecido logró escapar y minutos después, a unas cuatro cuadras de Coronel Suárez al 1100, fue encontrada la camioneta.
Reynoso es el agente número 23 muerto a balazos en lo que va del año teniendo en cuenta los casos registrados en el Conurbano y en la Capital Federal. Doce de ellos eran integrantes de la Policía de la provincia, nueve de la Federal, otro de la Policía de Santa Fe (se encontraba de vacaciones) y el restante era un retirado de la Policía de Seguridad Aeroportuaria.