Sábado 11 de May de 2013
El joven es uno de los máximos referentes de la canción folklórica del país. El show se prolongó durantes dos horas y media. Un video recorrió sus 16 años de trayectoria con la música.
El cantautor Abel Pintos concretó la noche del viernes el primero de los cinco conciertos programados en el estadio porteño Luna Park para coronar un presente que lo ubica como el máximo referente de la canción folclórica argentina.
Con el repertorio de sus dos últimos exitosos álbumes "Reevolución" y "Sueño dorado" como convocantes y las presencias de León Gieco y Raúl Lavie, el trovador encabezó una velada festiva y enteramente disfrutable en sus dos horas y media de duración.
Un video que recorrió sus 16 años de trayectoria sirvió de resumen para un tránsito que hoy día parece no tener techo y fue prólogo para adentrarse en un cancionero que el público que colmó el estadio disfrutó intensamente.
Sustentado en la sobresaliente banda que lidera su hermano Ariel en guitarra, arreglos y coros, Marcelo Pedracino en guitarras, charango y coros, Alfredo
Hernández en piano, teclados, programaciones y coros, Norberto Córdoba en bajo, teclados y coros y Claudio Di Cicco en batería y percusión, Pintos desplegó una sonoridad que va de lo rítmico a la balada y que incluye pizcas de zamba.
"Hasta aquí", "Tiempo", "Todo esta en vos", "Sueño dorado", "Cactus", "No me olvides", "La llave", "El beso/Quisiera" y "Peregrinos", formaron parte de la primera parte del show. Promediando la noche, el cantor tanguero Raùl Laviè que fue el artista a quien Abel le entregó un casette con sus canciones y que le prestó atención a la cinta, su sumó para compartir una versión de "Nada", de José Dames y Horacio Sanguinetti.
Otra seguidilla propia con "Quién pudiera", "Flores en el río", "Hallelluja", "Ofrezco", "Aventura", "Tu voz" y "Crónica", prologó la visita de León Gieco, quien salió portando el galardón de Doble Platino por las ventas de "Sueño dorado". Sumando a Nicolás Taranto, baterista de Infierno 18, entonaron "Canta" y "El arrepentido", pero León, quien en 1998 le produjo el debut discográfico con "Para cantar he nacido", reapareció sobre el tablado con una torta para anticipar a los 29 años que el artista nacido en Ingeniero White cumplió ayer.
El concierto se remató con los infaltables "Abismo", "Bella flor" y "Revolución" y mostró la contundencia de una propuesta que siguió anoche y hoy, y los próximos sábado y domingo 18 y 19 de mayo.
